Cuando nuestras gatitas o perritas van creciendo, reflexionamos en que pronto entrarán en celo y en la edad reproductiva. Y dependiendo de lo que sepamos y hagamos, esto será para nosotros algo normal o algo inquietante. Para nadie es un secreto que la superpoblación animal afecta su posibilidad y calidad de vida; y al ser personas responsables, debemos intervenir a fin de no generar males mayores, como abandono de gatas preñadas, sus crías e incluso de madres con sus crías.
En las perras comúnmente se presenta el primer celo a los 9 meses del nacimiento, aunque las hembras de razas pequeñas podrían entrar en celo mucho antes. Por otro lado, las gatas son maduras sexualmente entre los 6 y 9 meses de nacidas. Aún así, en algunas gatas se presenta el primer celo al tener un año de vida. Las perras y gatas son fértiles durante toda su vida; pero su capacidad de reproducción disminuye aproximadamente al llegar a los 8 años de nacidas.
Fases del celo en perras y gatas
Durante el periodo de celo las gatas o perras se preparan para la cúpula con el macho de su especie y también para una posible preñez. En la primera fase del celo, llamada proestro, la hormona FSH propicia el crecimiento ovárico y estos segregan estrógenos, dando comienzo al ciclo del celo. Esta primera etapa del celo en las perras puede durar unos 9 días y en las gatas durar 2.
Luego comienza la fase llamada estro, cuando se activa la hormona LH responsable de la liberación de los óvulos y una posible preñez. Durante este tiempo en las perras desaparecen las supuraciones por la vulva y en las gatas los constantes maullidos y frotamientos sobre objetos. Comienzan a aceptar al macho y adoptan posturas para propiciar la cópula, como la exposición clara de sus genitales. Esta fase dura en las perras 9 días y en las gatas unos 6 días.
Frecuencia del celo en perras y gatas
El celo en las perras no es tan regular, pero por lo general tienen 2 celos al año. El celo en las gatas es influido por la luz solar, por ello durante el invierno hay un detenimiento del celo. Pero si tu gata vive mayormente bajo luz artificial, esto podría llevarla a entrar en celo cada 2 o 3 semanas hasta que ocurra una preñez.
Ahora detallemos algunos indicios de las fases del celo, para que puedas actuar responsablemente antes y durante el mismo.
Síntomas que indican el comienzo del celo
En las perras el tamaño de su vulva aumenta y se presenta una mucosidad sanguinolenta; orinan con más frecuencia pero en poca cantidad.
En las gatas no se observan cambios físicos, ni secreciones, por eso el celo podría pasar inadvertido. Sin embargo, se aprecian cambios de comportamiento, como un aumento de los maullidos y la necesidad de frotar su cuerpo contra mobiliarios u otros.
Al comienzo del celo las gatas y perras atraen a los machos, pero al no estar completamente listas para la cópula muestran un comportamiento agresivo con el macho e impiden la monta o cópula. También se muestran mucho más agresivas.
Síntomas que indican que la perra o gata ya entró completamente en celo
En las perras desaparecen la emisión de mucosidades por la vulva y en las gatas los maullidos y el frotar su lomo contra el suelo.
Cuando las perras y gatas están en pleno apogeo por el celo, aceptan la presencia del macho con tranquilidad y adoptan posiciones que facilitan la monta o cópula. Entre ellas, levantan el tronco, elevan su cola para exponer completamente sus genitales, están menos agresivas, etc. El tiempo de esta fase dura en las perras 9 días y en las gatas 6 días, aproximadamente.