Las frutas deshidratadas constituyen uno de los alimentos tipo snack más saludables que existen en el mundo. Su consumo se asocia a una gran variedad de propiedades que pueden generar efectos muy positivos en el organismo de cualquier persona porque son realmente exquisitas.
Uno de los ejemplos más consumidos en el mundo es la ciruela pasa. Ésta es un fruto seco que tiene como principal característica el elevado nivel de fibra que se encuentra en su estructura, siendo un apoyo ideal para personas que sufren casos de estreñimiento o que también desean rebajar algunos kilos.
La misma puede ser consumida de manera natural aunque también es común que se utilice como complemento de algunas preparaciones, sobre todo dulces. Las ciruelas pasas se pueden preparar en casa con un proceso sencillo, aunque un poco extenso, pero dando como resultado la recompensa de haberlas hecho por nosotros mismos.
Fuente importante de vitaminas
Todas las frutas contienen vitaminas y eso lo sabemos bien. Pero cuando éstas pasan por el proceso de deshidratación, sus vitaminas se concentran, permitiendo aportar mayores niveles a la hora de consumirlas. Esta condición les hace ser ideales para ser utilizadas por personas que realizan actividades donde se da un importante desgaste físico, como practicar senderismo.
Dentro de las principales vitaminas y demás nutrientes que podemos encontrar, están las vitaminas B1, B2, B3, calcio, hierro, magnesio, provitaminas A y E, potasio, entre otros.
Combaten el estreñimiento
Ya comentábamos del alto nivel de fibra que tienen las ciruelas pasas y ésta es una característica muy común en los frutos deshidratados. Gracias a esta condición son unos excelentes aliados para trabajar en contra del estreñimiento de manera natural, sin volverse víctima de los efectos secundarios que suelen traer consigo los laxantes farmaceuticos.
Solo contienen azúcares simples
Las frutas deshidratadas son deliciosas, en buena medida, por la cantidad de azúcar que tienen y que son agradables al paladar. No obstante, se tratan de azúcares simples que no son perjudiciales para el torrente sanguíneo, lo que las vuelve un buen complemento en la dieta de personas que sufren de diabetes y otras enfermedades de condición permanente.
Son saciantes
El consumo de snacks de diferentes tipos, generalmente llenos de grasas y azúcares, es cada vez más habitual y son los encargados de promover muchas de las enfermedades que padece hoy el ciudadano común. Esto se puede ver modificado cuando en vez de consumir esos snacks, realizamos un intercambio hacia las frutas deshidratadas.
Otra buena razón tiene que ver con la saciedad y es que consumirlas entre comidas permitirá sentir un cierto grado que ayudará a disminuir el consumo excesivo de alimentos que se realiza durante la comida o la cena, sirviendo a la vez como estrategia para reducir el peso.
Son antioxidantes
Y la última razón que lleva a preferir el consumo de frutas deshidratadas tiene que ver con el hecho de que contienen elementos antioxidantes en su estructura, específicamente los carotenoides y los polifenoles. Éstos se encuentran sobre todo en aquellas frutas que son de color oscuro, como las ciruelas y las uvas pasas, pero quizás el fruto que se lleva un sitio de honor en esta materia son los albaricoques, que también tienen la buena propiedad de ayudar en todo lo que tiene que ver con el sistema cardiovascular.
Realizar pequeños cambios en nuestro consumo diario de alimentos puede marcar la diferencia en el estado de salud. Los frutos deshidratados son fáciles de consumir, se pueden llevar a donde sea y existen tantas variedades como frutos secos para elegir el que más guste.