Planificar un evento corporativo es un proceso que requiere tiempo y dedicación, pero con las estrategias adecuadas te asegurarás de tener éxito. No importa si lo que estás organizando es una pequeña reunión o una gran conferencia, hay varios factores claves que debes tener en cuenta.
He aquí cuatro consejos esenciales que te guiarán en el proceso de la organización eventos corporativos y te ayudarán a crear una experiencia inolvidable para tus asistentes. Consiguiendo dejar la mejor imagen posible de la compañía o marca con la que trabajas.
Define claramente tus objetivos
Antes de sumergirte en la logística de tu evento, da un paso atrás y define lo que quieres conseguir. Esto es crucial porque tener unos objetivos claros guiará todas tus decisiones en el futuro. Es probable que quieras aumentar el conocimiento de tu marca, fomentar las oportunidades de establecer contactos o informar a tu público sobre nuevos productos. Si identificas estos objetivos, podrás adaptar el acto a tus necesidades específicas.
Asimismo, un propósito bien definido te ayudará a comunicar eficazmente tu visión al equipo y a las partes interesadas. Sienta las bases de todos los aspectos del acto, desde el tema y el lugar de celebración hasta los ponentes y las actividades. Por lo tanto, invertir tiempo en esta fase inicial te ahorrará un esfuerzo considerable más adelante.
Haz un presupuesto inteligente y cúmplalo
Una vez fijados los objetivos, el siguiente paso es elaborar un presupuesto. Este paso, más allá de ayudarte a gestionar tus gastos, te garantizará una asignación eficaz de los recursos. Cuando planifiques tu presupuesto, ten en cuenta todos los costes posibles, incluidos el alquiler del local, el catering, la tecnología, el marketing y cualquier espectáculo que desees incluir.
Del mismo modo, es aconsejable reservar un fondo para imprevistos. Los eventos suelen deparar sorpresas, y contar con un colchón financiero será de gran ayuda para afrontar estos problemas sin desbaratar tus planes. También es preciso asegurarte de llevar un control exhaustivo de tus gastos, debido a que esto será ventajoso para no salirte de tu presupuesto y a evitar cualquier estrés financiero de última hora.
Elegir el lugar adecuado
El lugar que elijas es capaz de influir considerablemente en el éxito de tu evento. No solamente tienes que adaptarse al número de asistentes previsto, también es necesario reflejar el tono y los objetivos del acto. Por ejemplo, si vas a celebrar una conferencia formal, un salón de baile tradicional podría ser adecuado. Por el contrario, si tu evento es más informal, un espacio único como una galería o un sitio al aire libre conseguirá mejorar la experiencia.
Además de la estética, es necesario considerar factores logísticos como la ubicación, la accesibilidad y los servicios disponibles. ¿Es el espacio fácilmente accesible para los asistentes? ¿Dispone de aparcamiento o transporte público? Del mismo modo, comprueba si el lugar cuenta con la tecnología y el equipamiento necesarios para tu evento, como sistemas audiovisuales y Wi-Fi.
Atrae a tu público
Por último, captar la atención del público es fundamental para crear un acto corporativo memorable. Para ello, es preciso pensar más allá de las presentaciones tradicionales y fomentar la interacción. En este punto, es ideal considerar la incorporación de sesiones interactivas como talleres, mesas redondas o segmentos de preguntas y respuestas. Estos elementos fomentan la participación y hacen que los asistentes se sientan valorados.
Aprovecha la tecnología para mejorar la participación. Herramientas como las aplicaciones para eventos proporcionan a los asistentes horarios, información sobre los ponentes y oportunidades de establecer contactos. Las redes sociales también contribuyen a crear expectación antes, durante y después del evento. Anima a los asistentes a compartir sus experiencias en línea, de esa forma, consigues aumentar la visibilidad y el alcance de tu evento.