Las mejores marcas
Existen varias marcas de impresoras 3D para uso doméstico y semi-industrial, que son buenas opciones para los interesados en aprovechar este tipo de impresión.
La marca Creality cuenta con un modelo muy destacado, el Creality Ender 3 V2, una impresora 3D con una buena fuente de alimentación que la protege de sobrecargas, cuenta con una pegatina de plataforma magnética que hace más sencilla la adhesión y la retirada del objeto impreso, y ofrece una mayor estabilidad.
Por su parte, la marca Artillery ofrece al mercado el modelo Sidewinder X1, una máquina muy silenciosa que calienta con rapidez, perfecta para principiantes y usuarios experimentados que busquen impresiones de calidad.
Mientras que Anet cuenta con el modelo A8, una opción muy económica para principiantes, dado que permite conocer los aspectos básicos de la impresión 3D con mayor facilidad. Ofrece una buena velocidad de impresión y es muy efectiva.
Prusa es otra marca reconocida en el sector, gracias a su modelo I3 MK3S+, la sucesora del modelo i3 MK2, que cuenta con numerosos premios. Dispone de numerosos sensores, un nuevo extrusor y una base magnética mejorada.
Por último, entre las mejores marcas está Anycubic, que con su modelo Mega S, permite aprovechar una máquina con un extrusor de calidad y precisión; es compatible con cualquier material de impresión 3D y su pantalla táctil es intuitiva.
Estas marcas y modelos son los mejores del mercado, siendo perfectos para usar por principiantes y profesionales, ya sea en el hogar o en una empresa, permitiendo así que se puedan obtener objetos de gran calidad y bien diseñados, todo de forma fácil y rápida.
¿Cómo elegir la impresora 3D indicada?
Antes de preguntarse qué impresora 3D comprar, es importante tener en cuenta varios factores, dado que los mismos facilitarán la elección de la impresora 3D perfecta para cada usuario.
Lo primero a considerar debe ser el tipo de material a imprimir, por lo que será fundamental revisar que la impresora 3D sea compatible con el material que se necesita para la impresión de un objeto determinado.
De igual manera se debe tener en cuenta el uso, si es doméstico, educativo o profesional, dependiendo de esto se podrá elegir entre uno u otros modelos. Por ejemplo, para el hogar se buscan modelos silenciosos y que ensucien poco; mientras que para el ámbito profesional, impresoras de gran tamaño y con funciones específicas para cada sector.
Además, será importante considerar el volumen de impresión, ya que para impresiones grandes se recomiendan impresoras con bases de 20x20cm; mientras que para impresiones más pequeñas, las de 15x15cm sirven a la perfección.
Lo último a considerar debe ser el precio de las impresoras, de forma que los modelos más profesionales y de mayor tamaño costarán mucho más que los domésticos y compactos. Sin embargo, en el mercado existen numerosos modelos con buena relación calidad-precio.
Son muchas las ventajas de tener una impresora 3D en la actualidad, dado que se trata de un equipo muy práctico, cómodo y fácil de utilizar, y que se puede colocar en cualquier parte del hogar o de la oficina.
Además, permite crear de forma rápida cualquier tipo de objeto, desde figuras, zapatos, equipos de fitness, juguetes, entre otros, todo dependerá de los tipos de objetos que se necesiten en el sector empresarial, o bien, de los intereses de las personas, así como de los materiales a utilizar.
De igual manera, los objetos de impresión se pueden personalizar de acuerdo a las necesidades de cada cliente, un aspecto muy útil para las marcas. Y al ser máquinas más asequibles en precios, cualquier persona o empresa puede tener una.
Por medio de las impresoras 3D, los particulares y los profesionales pueden contar con una máquina capaz de imprimir todo tipo de objetos, con el diseño y el tamaño que se quiera, sin tantas complicaciones y con una gran resistencia, siendo de mucha utilidad para el uso doméstico, educativo y empresarial.