En la mayoría de las ocasiones, los niños no son conscientes de lo que manipulan al cabo del día. Es por eso que están más expuestos a virus, bacterias y gérmenes, elementos que los hacen enfermar. He aquí, precisamente, algunas de las enfermedades más frecuentes que sufren los más pequeños.
Las enfermedades más comunes entre los niños
Al igual que ocurre con los adultos, la gastroenteritis es una de las enfermedades más frecuentes entre los niños, suele venir acompañada de vómitos, diarrea y dolores abdominales. Tal y como se puede ver en infusionmanzanilla.com, tomar infusiones de manzanilla es muy beneficioso para este problema estomacal. Pero además, se trata de una bebida ideal por sus propiedades analgésicas y antiinflamatorias.
La varicela, el sarampión y la rubeola, son tres enfermedades infecciosas muy frecuentes en la infancia. Todas ellas están causadas por un virus y provocan la aparición de granos, picor intenso y escozor en la piel. Hay que prestar especial cuidado si se tienen hermanos que no han padecido alguna de las tres enfermedades, ya que son muy contagiosas.
Los niños también suelen tener muchos problemas infecciosos en la boca. Esto les lleva a que puedan sufrir enfermedades como la parotiditis, la rinofaringitis o la amigdalitis aguda. Los síntomas de todas ellas pueden ser tos, fiebre, congestión nasal, dolor de cabeza y de garganta, rinorrea, inflamación, etcétera.
La otitis media es otro de los problemas que suelen sufrir los más pequeños, consiste en la inflamación del oído a consecuencia de una infección, en la mayoría de los casos se produce fiebre, dolor en el oído y problemas para dormir. Es muy importante tratarla a tiempo, ya que de lo contrario podría convertirse en crónica.
El problema de una otitis crónica puede provocar con el tiempo que la persona pierda audición. La Clínica de Salud Auditiva Efeta en Córdoba son especialistas en enfermedades y trastornos del oído. Además, disponen de múltiples soluciones, como los audÃfonos en Córdoba, para solventar numerosos problemas auditivos en todo tipo de personas.
Trastornos más frecuentes en los niños
Los niños pueden llegar a sufrir diversos trastornos a lo largo de su desarrollo. Es muy importante que ante cualquier mínimo indicio, se acuda al especialista para que pueda tratar a tiempo, el problema.
El autismo, el trastorno específico del lenguaje, el trastorno por déficit de atención y los trastornos sensoriales, de aprendizaje y del desarrollo cognitivo, son los más frecuentes entre los pequeños.
Dentro del trastorno del aprendizaje pueden darse casos de niños con problemas de dislexia, disgrafía o discalculia. Por su parte, los trastornos de conducta pueden llevar a los niños a ser demasiado impulsivos, a distraerse con suma facilidad o a no prestar atención a sus padres y profesores.
Algunos de estos trastornos de conducta deben ser tratados de forma especial por una psicóloga infantil en Fuengirola. Una profesional de este tipo también puede resolver otras cuestiones relacionadas con el acoso escolar u otros problemas. Situaciones que se pueden dar a edades muy tempranas y que las familias no saben realmente cómo afrontar por sí mismas.
Un seguro de salud para la familia
Ante estas situaciones, muchos padres se plantean la posibilidad de contratar un seguro privado de familia. Una solución realmente muy interesante para tratar buena parte de los casos anteriores. La salud familiar es lo más importante y disfrutar de una buena cobertura sanitaria es fundamental.
Al mismo tiempo, se pueden obtener numerosas ventajas fiscales seguros de salud para trabajadores, empresas y autónomos. No en vano, en muchos casos la prima que se abona por un seguro de salud puede ser un gasto deducible para el usuario.
A tenor de esto, lo cierto es que disponer de un seguro de este tipo puede resultar más que rentable si se tienen niños en casa. A lo largo de su infancia, son muchas las ocasiones en las que caen enfermos, de ahí que la inversión que se haga mes a mes, está más que garantizada.
Además, son muchas más que las citadas, las enfermedades en las que pueden caer los más pequeños. Aquí sólo se han detallado las que, probablemente, todos los niños habrán pasado en alguna ocasión.