La más alta tecnología se ha unido a los mejores materiales para alcanzar casi la perfección en la fabricación de estos brazos robóticos precisos que realizan trabajos concretos y minuciosos
La robótica es una industria que está alcanzando hitos día a día. Por ese motivo, los ingenieros industriales se unen a los mecánicos y a los biotecnólogos para, conjuntamente, crear piezas que sirvan para mejorar la vida de las personas, producir de una manera muy precisa, rebajar los riesgos laborales en la fábricas y, por supuesto, ser más productivos.
En ese sentido, piezas como un brazo robotizado ayudan mucho a conseguir esos objetivos. Es más, industrias tan precisas como la domótica, la electrónica, la fabricación de microchips, pero también la de aparatos y artilugios clínicos e incluso medicamentos, precisan de estas destrezas tecnológicas para ofrecer un producto final en las mejores condiciones.
En Universal Robots saben de estas necesidades del mercado y han lanzado un brazo robótico multidisciplinar que se adapta a la fabricación de productos, elementos y compuestos que requieren de estas destrezas de alta tecnología. Es evidente que el ciclo de fabricación que se abre con este tipo de herramientas hace a las fábricas más productivas, más excelentes y más precisas. De ahí que estén proliferando, cada vez más, su uso.
Pero ¿qué es un brazo robótico? En esencia, se trata de un robot que consta de dos partes articuladas que son rotatorias y paralelas. Lo que permite esta tecnología es realizar trabajos de pick and place o, lo que es lo mismo, coger y dejar. Por tanto, la tarea principal que tienen estos brazos robóticos es la de coger objetos y/o piezas y depositarlos en otros lugares. Pero bien descrito, además, si se añade la más alta tecnificación lo que hacen estos aparatos es impulsar a las fábricas a lograr una mejor productividad, aumentar el ritmo de fabricación y ser más eficiente y preciso.
A todo ello contribuye una fuerte apuesta por la tecnología, por materiales de nueva generación y por herramientas en la industria que mejoran las condiciones de fabricación.
El modelo de brazo robótico UR5e tiene una gran ligereza y una gran capacidad de adaptabilidad. A todo eso, se suma también que su gama de aplicación es enorme, por lo que muchas industrias especializadas lo pueden implementar en sus espacios de fabricación con todas las garantías.
Unas características que lo hacen único
En la misma línea de lo anterior, el UR5e posee unas características propias que lo hacen único en el mercado. Entre estas, está su alcance de 850mm o la carga útil que asciende hasta los cinco kilos. Tiene una huella de soporte que, en ningún caso, supera los 149 mm y un peso total, en el conjunto del aparataje que no es mayor de 20,6 kilogramos. Por tanto, se puede decir que es una pieza ligera y muy ágil.
También hay que tener muy en cuenta la capacidad que posee este brazo robótico una vez tiene desempeñada una misión de fabricación. En este caso, se puede decir con certeza que es muy fácil de instalar y también de programa. Una de las cuestiones más bondadosas de este brazo es que son colaborativos, eso, pues, ayuda a los operarios en su tarea y mejora sus condiciones, sin prescindir de sus puestos. Se podrá cambiar de líneas de producción de manera frecuente y muy rápidamente, eso denota que tiene una gran flexibilidad de uso.
Ahorrar tiempo en favor de la productividad
Esta es una cuestión muy ventajosa para las empresas y las fábricas que instalan estos brazos robóticos. Por un lado, permite que los procesos sean mucho más colaborativos, eso hace que los empleados descarguen parte de su labor mecánica y todo ese potencial laboral se puede utilizar para revitalizar otras fases o áreas productivas de la compañía.
En definitiva, usar brazos robóticos en la industria es muy productivo, ayuda a mejorar las condiciones laborales de los empleados y también a que sea más precisa la manufactura. Por todo ello, cada vez, están siendo más adquiridos e implementados.