Atravesar un caso de lesiones personales es sin duda una situación traumática que puede traer dolor físico, pero también estrés y sufrimiento emocional.
Por eso, las víctimas de una situación en la que se vieron afectadas por la negligencia o el accionar de terceros tienen derecho a pedir un resarcimiento económico que compense, en cierta manera, los daños sufridos.
La figura de un abogado en ese sentido puede ser de gran importancia, para poder entender los elementos de un reclamo por negligencia antes de poder recuperar los daños, y poder así hacer frente a un proceso legal que muchas veces puede resultar engorroso.
Si bien las pérdidas económicas son varias en estos casos, podemos enumerar las más resonantes en la vida de las víctimas.
Gastos médicos
Se trata de los gastos más directos relacionados con la atención médica, como pueden ser cirugías, medicamentos, terapias, y cualquier otro tipo de tratamiento para la recuperación.
Estos gastos también se calculan a futuro, por las atenciones médicas que la víctima necesitará si una lesión perdura en el tiempo.
Pérdida de ingresos por falta de trabajo
Es otra situación a la que puede exponerse una víctima de lesiones, que podría verse imposibilitada de asistir a su puesto de trabajo o de generar ingresos por las heridas recibidas.
Esto podría afectar su capacidad de cubrir sus gastos diarios, y además podría tener impacto en su labor o carrera profesional a futuro.
Daños materiales
Muchas veces, donde existen lesiones personales también hay daños materiales producto del incidente, como puede ser un auto chocado o daños a la propiedad privada.
Por eso también es importante calcular los costos o el reemplazo de las partes dañadas en cualquier tipo de reclamo indemnizatorio.
Costos legales
Como mencionamos anteriormente, contratar a un abogado especializado en este tipo de reclamos puede ser primordial para tener éxito. Pero esto también representa un costo.
La mayoría de los profesionales incluyen sus honorarios, tasas judiciales y otros gastos periciales dentro del valor final de la indemnización. Aunque no todos los legistas trabajan de la misma manera.
Por lo tanto, debes saber que hay costos administrativos que podrías asumir, dependiendo de la circunstancia en que se desarrolla el litigio.
Determinar la negligencia de la otra parte es clave en todo este proceso. Por lo tanto, la recopilación de todo tipo de evidencias que respalden tu teoría resulta vital en este tipo de reclamaciones.
En la web de Archivos Nacionales destacan el Código Federal de Regulaciones, está explícitamente desarrollado este tema y marcan la importancia de las pruebas para poder demostrar el monto de los daños económicos. En el artículo se enumeran los elementos más importantes de los daños económicos para cualquier caso de lesiones personales.
En ese sentido, también están contemplados los daños subjetivos o llamados “no económicos”, pero que sí representan un valor real para la víctima. Estamos hablando de consecuencias como el dolor, la angustia emocional, ansiedad, depresión y demás situaciones producto del accidente, tal como especifica el Colegio Americano de Cirujanos en su página web.