Las casas antiguas requieren un cambio de imagen para que puedan estar en perfectas condiciones de habitabilidad. En lugar de dejarlas abandonadas, ¿por qué no realizar algunas reformas interiores y exteriores? Antes de dar el paso, es preciso conocer cuáles son los distintos permisos que debemos tener para realizar las obras y que se realice el procedimiento de forma legal.
Para llevar a cabo una reforma es conveniente contar con profesionales de la construcción que ofrezcan garantía de calidad. Por eso, si el inmueble se localiza en alguna zona próxima a la capital española, es preciso contar con una empresa vinculada a las reformas integrales en Madrid, solo así puedes dar solución a tus deseos y cumplir con todas las expectativas. ¡Ha llegado el momento de renovar la imagen del hogar!
Las licencias de obras
La solicitud se debe presentar en el ayuntamiento de la localidad donde se encuentre el inmueble; de este modo, se obtiene la licencia de obra, la cual se puede entender como el permiso dirigido para hacer una reforma. Existen una serie de condiciones para lograr esa concesión, siendo la administración local la que se encarga de marcar esa pautas que deben cumplirse, al igual que las tasas y las posibles sanciones.
- Por un lado, se encuentra la licencia de obra menor. Se utiliza para pequeñas reparaciones, cambios sencillos, instalaciones de cerramientos (puertas o ventanas), adaptaciones de espacios, etc. En otras palabras, nos encontramos con un planteamiento técnico básico y funcional.
- Por otro lado se encuentra la licencia de obra mayor. Obviamente, esta se encuentra vinculada a todo tipo de obras de mayor envergadura en comparación con las anteriores. Nos estamos refiriendo, por ejemplo, a la modificación de la estructura de una vivienda, levantamiento de muros, nueva distribución, ocupación de superficies, ampliación en altura o en laterales, etc.
En este caso, se necesita un proyecto de reforma con la firma de un arquitecto colegiado, recibiendo la consiguiente aprobación del ayuntamiento de la localidad.
Reformas que no requieren permisos
Se puede dar el caso en el que la reforma que se vaya a realizar no requiera ningún tipo de permiso. Cualquier acción sencilla, como pintar, alicatar, hacer instalaciones o cualquier pequeño cambio de imagen, no requieren una tramitación como en los casos anteriores.
De todas formas, siempre es bueno acercarse al ayuntamiento y solicitar información. Así puedes salir de dudas respecto a los permisos que debes tener o, por el contrario, si no es necesario pasar por este tipo de trámites. No hay que iniciar una reforma de forma improcedente, ya que puede conllevar riesgos que, a largo plazo, puede generar bastantes problemas.
En definitiva, el devenir de los años puede ocasionar distintos desperfectos que, al fin y al cabo, merece la pena solucionar. ¿Para qué seguir residiendo en un lugar que no se encuentra en buenas condiciones? Si vemos conveniente modificar algunas partes de la casa, es preciso que nos animemos a dar el paso y encontrar los permisos oportunos para que todo quede en regla y se realice de forma legal.