Para vestir bien es imprescindible llevar la ropa con un planchado impecable. Una camisa con una arruga en la pechera causa una pésima impresión, y es capaz de arruinar todo el atuendo. Además, llevar un vestido o una camisa arrugada transmite una sensación de dejadez y de descuido que puede ser muy negativa. En cambio, las prendas bien planchadas “brillan” más y realzan la figura. Si se quiere causar una buena impresión, es importante un buen planchado.
Ahora bien, es cierto que en la vida moderna el tiempo es oro. Y que muchas veces resulta difícil sacar el tiempo necesario para, ya por la noche, planchar una camisa con la que volver al día siguiente a la oficina. Planchar exige, sobre todo, tiempo; y eso es algo que muchas veces no sobra. Por eso, para lograr un planchado impecable muchas personas se veían obligadas a recurrir a profesionales. Hasta ahora.
Planchas verticales: cómo vestir impecable cada día
En la actualidad, se están popularizando para uso doméstico modelos de plancha con prestaciones profesionales, económicos y muy eficientes. Es decir, planchas que son capaces de proporcionar un resultado muy bueno en poco tiempo, y que sirven para que podamos volver a lucir una camisa o un vestido que tiene alguna arruga que la desluce.
Es el caso de las planchas verticales a vapor. Una plancha vertical, a diferencia del centro de planchado, apenas toca la ropa para proceder al planchado. Además, su uso es fácil y cómodo porque el planchado se puede realizar sin tabla, con la ropa colgada de una percha. Su uso en los hogares llegó después de su implantación en las boutiques y tiendas de ropa, que las usan desde hace tiempo por su fiabilidad, facilidad de manejo y rapidez.
Funcionan gracias a un emisor de vapor colocado en el mango o cepillo, que es capaz de humedecer la prenda y reblandecer la textura arrugada. Por efecto de la gravedad, esta acaba estirándose. Por eso, son perfectas para dejar perfectamente estiradas las prendas que ya cuentan con algún uso, y que aún no están sucias. Basta un lavado a vapor para dejarlas nuevamente en perfectas condiciones. Además, son muy eficaces para desodorizar y sanear el tejido.
Centros de planchado
Ahora bien, es cierto que las planchas verticales pueden no ser suficientes para acabar con las arrugas difíciles en tejidos rebeldes. Son, más bien, un complemento que nos permitirá disponer de la prenda nuevamente lista para su uso en apenas un minuto.
Para esos casos, lo mejor es disponer en casa de un centro de planchado a vapor, que ofrece unas prestaciones similares a lo que obtendrías de un servicio profesional. Se trata de un electrodoméstico compuesto por una plancha de ropa tradicional, un generador y un depósito de vapor independiente. El depósito de agua diferenciado permite que los centros de planchado generen mucho más vapor que una plancha de ropa convencional, obteniéndose un planchado impecable. Con un centro de planchado las arrugas rebeldes y difíciles se alisan a la primera, sin necesidad de realizar varias pasadas.
El centro de planchado dejará tu ropa perfecta, mientras que una plancha vertical te permitirá vestir cada día recién planchado, sin apenas dedicarle tiempo y esfuerzo.