Existen una serie de productos especiales y servicios necesarios que se requieren en ciertos sectores comerciales o en el curso de un año fiscal. La carpintería metálica, la fabricación de toneles para la industria alimentaria y el asesoramiento fiscal como los procuradores de los tribunales son muestra de esto. Nadie debe perderse esta información.
Carpintería metálica Almarjal para todo tipo de proyectos
La carpintería metálica es un oficio muy meticuloso y apreciado en el que se utilizan metales para crear productos funcionales (puertas, ventanas, rejas), ornamentales (cabeceros de camas, muebles), estructurales (vigas, soportes de escalera) y casi cualquier otro tipo de objetos de uso cotidiano o especiales.
Si se considera en sentido amplio, puede denominarse metalistería o herrería, pero dadas sus raíces, el término «carpintería» ha quedado arraigado en la palabra por la delicadeza de un trabajo manual y artesanal.
Los productos construidos con madera empezaron a fabricarse y a sustituirse con metales cuando la humanidad reconoció el potencial y la durabilidad de estos, además de las aleaciones para usos arquitectónicos, decorativos y estructurales.
Los primeros artículos en utilizar hierro y sus aleaciones fueron las puertas y ventanas, lo que hizo que un gran número de trabajadores que antes se dedicaban a la carpintería fabricando estos productos se dedicaran a la herrería.
Hoy son cientos los productos muy estéticos que se elaboran en metal. Con tan solo ver el catálogo de la Carpintería Metálica Almarjal te asombras con las maravillas que sus maestros pueden crear con ingenio y años de experiencia.
2.- Tonelería Herfe: al servicio de la industria alimentaria
La tonelería es el oficio, casi un arte, de construir barriles (o toneles) de madera para contener diversos productos alimenticios. Estos abarcan desde cereales, mantequilla hasta bebidas alcohólicas como el whisky o el vino, cuyos procesos de añejado y conservación, además de aromas y sabor, serían imposibles de lograr sin estos contenedores.
Se trata de una antigua costumbre que ha perdurado hasta hoy, pero que sigue gozando de la popularidad de antaño debido a sus múltiples beneficios.
En la Tonelería Herfe se esfuerzan por ir más allá y para satisfacción de sus clientes, quienes esperan la atención, con prontitud, de sus necesidades.
El sistema de gestión de la calidad de esta empresa está respaldado por una plantilla dedicada y cualificada que garantiza el cumplimiento de los requisitos de cada producto y la mejora continua del proceso.
En este sentido, cumplen con lo siguiente:
- Definir, evaluar y actualizar periódicamente el cumplimiento de esta política.
- Organizar los distintos programas de formación para que sus empleados obtengan los conocimientos necesarios.
- Crear los canales de información y comunicación para que todas las personas de la organización participen en la gestión de la calidad.
3.- Susana Ballesteros: representante procesal y mediador civil en los juzgados y tribunales
El Procurador es un abogado colegiado y registrado en el Colegio de Abogados correspondiente. Consiste en una profesión libre, independiente y afiliada cuya función primordial es la representación técnica de sus clientes en diversos procedimientos. Pueden ejercer como asesor fiscal en Almería.
La función del Procurador se rige por la LEC (arts.23 a 34), la LOPJ (arts.543 a 546) y el Estatuto General de los Procuradores de los Tribunales de España, aprobado por RD 1281/2002, de 5 de diciembre.
Susana Ballesteros es procuradora de los tribunales en Almería y entre sus labores destacan:
- Seguir el procedimiento y estar al tanto de todas las fases.
- Mantener informados al cliente y a su abogado.
- Responsabilizarse de todos los trámites, incluyendo la recepción y firma de las citaciones, notificaciones y demás documentos. Todo ello en interés del cliente.
- Enviar todos los papeles e instrucciones para que lleguen a poder del abogado.
- Rendir cuentas por escrito de los gastos en que haya incurrido a petición del cliente y abonarlos.
Las funciones del procurador pretenden agilizar el proceso judicial impidiendo que los demandantes provoquen retrasos innecesarios, se salten pasos o incurran en fraudes de ley. También les exigen que proporcionen toda la cobertura legal y procesal necesaria antes de la administración de justicia.