Se trata de un tipo de póliza que cada vez contratan más empresas y trabajadores autónomos, incluso los particulares. Lo cierto es que se puede deducir como gasto en la declaración de la renta y, en la mayoría de los casos, cuenta con algunos beneficios fiscales que merece la pena conocer.
Es evidente que a todo el mundo le preocupa su salud, por este motivo, cada vez son más las personas que deciden contratar uno de estos seguros. Lo cierto es que las empresas y trabajadores autónomos también están apostando por ello, ya que el contar con un seguro de salud permite disfrutar de numerosas coberturas sanitarias prácticamente en cualquier momento y lugar.
Aparte de todo esto, hay que decir que, además de los beneficios en materia de salud, este tipo de pólizas también ofrecen ciertas ventajas fiscales si bien es cierto, estos beneficios solo se establecen para las empresas y trabajadores autónomos, no así en los particulares.
¿Qué beneficios destacar?
Como se ha mencionado, contratar los servicios de un seguro médico se traduce en poder disfrutar de ciertos beneficios fiscales, tanto las empresas como los autónomos. En este sentido, una de las primeras cosas que hay que tener en cuenta es que, este tipo de pólizas se pueden deducir como gasto en la declaración de la renta, con la excepción de algunas comunidades autónomas cuya normativa específica que hay alguna bonificación o deducción autonómica en este sentido y por tanto, no son acumulables.
Si bien, en el caso de ser un trabajador autónomo o una empresa y se tributa por el formato de estimación directa en el IRPF, entonces ocurre que sí se tiene derecho a una deducción, en este caso de hasta un máximo de 500 euros por persona y año natural. Aquí incluso se computa no solo la cobertura propia, también la del cónyuge y los hijos o hijas que tengan menos de 25 años y no estén emancipados.
De igual modo, hay que decir que si como tomador de la póliza de salud se desea incluir a aquellas personas que trabajan en la empresa, la prima de este seguro se considerará como gasto deducible en la declaración del IRPF o bien, en el Impuesto de Sociedades.
Más ventajas a tener en cuenta
Como se ha podido observar, a un empresario siempre le conviene contar con uno de estos seguros, debido a todas las ventajas que ofrece. Además de las mencionadas, hay que decir que en el caso de proporcionar a los empleados un seguro de salud, esto se considera un beneficio social y por tanto, se demostrará que no solo se preocupa por el bienestar de los mismos, también sirve como herramienta para motivarlos y trabajar mejor.
Por supuesto, otra de las ventajas que hay que destacar es que un seguro de este tipo permite tener mayor efectividad en el caso de que algún miembro de la plantilla tenga algún problema de salud, sabiendo que podrán acudir al médico sin esperas y teniendo acceso a todo tipo de pruebas diagnósticas o especialistas.
También es importante comentar que, en los últimos años, se ha demostrado que una empresa que ofrece un seguro de salud a los empleados aumenta su reputación y es un hecho que hace que las personas quieran trabajar para esta entidad. Esto conlleva a que la sociedad tenga una mejor imagen del negocio, sabiendo que esto son valores que cada vez buscan más los clientes.
Finalmente, otra de las cosas que hay que decir de las pólizas de salud que contratan las empresas es que pueden tener ventajas económicas más allá de las fiscales. Por un lado, porque el hecho de contratar este tipo de pólizas a nivel empresarial hace que el coste sea menor, ya que la mayoría de las compañías suelen tener ventajas en este sentido y dar mayores facilidades. Y por otro lado, hay que decir que esto permite que los empleados, en el caso de tener algún problema de salud, pueda tener un menor tiempo de recuperación, debido a la rapidez con la que suelen atender a los pacientes, lo que, a nivel empresarial, mejorará la productividad y el rendimiento.