En los últimos años se ha popularizado el uso de dormitorios sin cabeceros, y aunque para muchos resulte atractivo, lo cierto es que no es nada funcional. Los cabeceros acolchados no cumplen simplemente una función decorativa, pues estos también son ideales para aislar la cama del frío o del calor de la pared, todo dependerá de la temporada del momento.
Además, también sirven para proteger la pared de la suciedad, evitando que esta se manche por el roce constante de la ropa de cama o de almohada. Asimismo, los cabeceros son aptos para aportar la sensación de seguridad y confort que tanto deseamos conseguir en nuestros dormitorios, y por supuesto el factor decorativo sigue siendo fundamental.
Por eso, te invitamos a que sigas leyendo este post y descubras todo lo que los cabeceros acolchados puedan ofrecerte en comparación con otros materiales disponibles.
Beneficios de los cabeceros acolchados para tu habitación
¿Cuáles son los beneficios que ofrecen los cabeceros acolchados para tu habitación? A continuación, te mostramos algunos de ellos:
Tienes acceso a diversidad de modelos
Una de las mayores ventajas de los cabeceros acolchados es que puedes encontrar una gran diversidad de modelos y colores disponibles. Así que tienes la posibilidad de elegir entre el más económico, hasta el más lujoso, desde el más sencillo hasta el más sofisticado. Además, esta variedad aumenta la posibilidad de combinar con el resto del mobiliario.
Ofrecen un toque personal y confortable
Entre los estilos de cabeceros acolchados uno de los más utilizados son aquellos que tienen un diseño neutro. Por eso, no nos soprende que los colores como blanco, negro o gris sean unos de los favoritos. Y justo estos colores resultan ideales para combinar tus estancias en base al modelo que prefieras, ese con el que te defines, que hará que tu dormitorio tenga tu propio toque.
Resultan ser piezas funcionales
Además del plus estético que los cabeceros acolchados aportan a tus estancias, también resultan ser funcionales. Lo decimos porque podemos usarlos como respaldo para ver la televisión, leer un libro o sentarnos a hablar con nuestra pareja, ya que aportan una comodidad simplemente espectacular. Y por último destacamos que sirve como un perfecto aislante.
Comparación de cabeceros acolchados, de forja y madera
Existe una gran variedad de modelos disponibles de cabeceros para el dormitorio. Pero ¿cómo saber cuáles de las opciones son las más convenientes? En esta sección te mostraremos las características de cada uno de ellos, y los beneficios que ofrecen en comparación con el resto. Así tendrás la oportunidad de sacar tus propias conclusiones.
Acolchados
En comparación con el resto de los materiales disponibles, los cabeceros acolchados son capaces de ofrecer una apariencia muy atractiva, algo que no siempre resulta tan sencillo para los cabeceros de madera y forja que mantienen un mismo estilo. Por ejemplo, entre los cabeceros acolchados, puedes elegir entre aquellos que son tapizados en diversos colores y texturas.
Forja
El nivel de seguridad que siempre hemos buscado en nuestro dormitorio, podemos conseguirlo con un cabecero de forja. Su material de fabricación lo convierte en un diseño duradero y resistente, además resulta ser muy fácil de limpiar y mantener. Además, puedes elegir modelos y diseños muy originales que ofrecen una sensación muy agradable y sencilla al lugar.
Madera
Los cabeceros de madera le dan mucha personalidad a los dormitorios y una de las cosas más llamativas de este tipo de material, es que son capaces de aportar una sensación de calidez increíble a cada rincón del dormitorio. Su carácter natural y belleza lo convierte en una opción ideal para las casa vacacionales pues el confort y la calma que transmiten es simplemente maravilloso.