El tema que hoy nos ocupa es muy susceptible y delicado; personalmente creo que lo más equilibrado y eficaz, es combinar lo bueno de la educación tradicional con lo novedoso de las nuevas estrategias de aprendizaje. Esto a razón de que la sociedad actual es muy dinámica, de cambios constantes; y debemos aceptar de manera abierta lo que desconocemos.
Los medios de comunicación constantemente reseñan noticias sobre alarmantes sucesos de violencia y bullying que llevan a cabo alumnos en contra de sus compañeros, la alta deserción escolar y otros temas; además, las depresiones que padecen los profesores son cada vez más conocidas. Entonces nos preguntamos: ¿sigue siendo efectiva la educación tradicional?
Características de la Educación Tradicional
Sí, la educación tradicional se centra únicamente en que el profesor(a) da el contenido y luego evalúa el conocimiento adquirido mediante un examen y es considerada todo un fracaso. Por otro lado, las nuevas estrategias de enseñanzas son muy útiles, pero sin buenos profesores que orienten, animen e impliquen a los alumnos para que el esfuerzo se enfoque en la dirección correcta, seguiremos igual.
Lo anterior es lógico de entender; cualquier estudiante puede estar expuesto a un sistema de estudios inadecuado, sea vía internet o a distancia (como es el caso de las nuevas estrategias de aprendizaje) o de manera presencial (como en el caso de la educación tradicional). Entonces, es vital combinar los avances tecnológicos con el talento de los buenos educadores.
Una Alternativa a la Educación Tradicional
La combinación anterior ofrece la oportunidad única de cambiar definitivamente los modelos educativos hasta ahora conocidos. Esto no es fácil, pues entre muchas cosas envuelve desafiar lo conocido, abandonar dogmas defendidos a muerte, adaptarnos a la rápida y cambiante era digital. Hacerlo nos ofrece la oportunidad de desestandarizar la educación y personalizarla para descubrir los talentos individuales de cada ser.
Para lograr eso es imprescindible, entre muchas otras cosas, facilitar a los estudiantes de los diferentes niveles educativos un ambiente en el que se motiven a aprender y, puedan descubrir de forma natural sus verdaderas pasiones. Sería una actualización más profunda de lo que hasta ahora se conoce en la educación tradicional como las llamadas pruebas vocacionales, que se imparten al final de la educación secundaria.
Lo que hace falta Cambiar
La educación adecuada y necesaria para los tiempos que vivimos requiere de educadores que den lo mejor de sí mismos; y la enseñanza debe concentrarse en los estudiantes. Es indispensable dar el poder a los orientadores creativos y entusiastas y que estos motiven y estimulen por igual la inteligencia, el hábito de estudio, el pensamiento crítico, la imaginación, la creatividad, entre muchas otras habilidades en los alumnos; uniéndolas con el innegable beneficio que hoy ofrecen las ciencias, las nuevas tecnologías y las estrategias de aprendizaje.
Esto es crucial para los estudiantes porque en el proceso de descubrir su vocación, requieren que otras personas los orienten. Personas que logran ver en ellos, lo que ellos por si solos no distinguen. Personas que conectan con ellos y les hacen dar lo mejor de sí. Entre estas personas tan especiales hay más de un profesor(a) comprometido en orientar.
Actualmente existen muchas personas que no se gradúan; frustradas, abandonan sus estudios sin saber cuáles son sus verdaderas habilidades y sin un rumbo certero a tomar. Millones sienten que en los centros educativos no valoran su potencial y otros millones creen que no son buenos en nada. Por eso, la educación tradicional debe actualizarse rápidamente y adecuarse a los tiempos que vivimos. Necesitamos una buena educación que nos permita encontrar lo que realmente nos apasiona; algo fundamental para nosotros y para el bienestar de nuestra sociedad.