Lo sabemos: los pisos en grandes urbes no son fáciles de encontrar. A la alta demanda se unen circunstancias como la subida de precios, la zona deseada o las condiciones de la propia vivienda. Sin embargo, aunque es difícil e implica tiempo, todavía es posible hallar un buen alquiler de pisos en Barcelona o Madrid, ciudades caracterizadas por una alta demanda.
Son varios los factores que debes considerar a la hora de obtener un buen contrato y no pagar en exceso por un piso o una habitación. Desde Servicom hemos redactado una guía para que puedas detectar chollos y no los dejes pasar. ¡Empezamos!
Los trucos definitivos para obtener un buen alquiler
-
Características de la vivienda
Antes de comenzar, es fundamental que pienses el tipo de vivienda y las condiciones que buscas: un piso completo, una habitación, un loft, varias habitaciones… Todo ello te permitirá ir delimitando la amplitud de la búsqueda.
En este sentido, no existe un único tipo de piso. En las grandes ciudades se pueden encontrar viviendas de todo tipo, desde grandes pisos para compartir con varios compañeros hasta viviendas unifamiliares o pequeños lofts. Por lo tanto, ten presente cómo será el día a día de la convivencia. Así, puede que no estés dispuesto a compartir piso o, por el contrario, lo prefieras.
Pese a ello, recuerda que siempre tienes que contar con un margen de maniobra, es decir, cierta flexibilidad. En la mayoría de los casos, conseguir la vivienda de tus sueños será complicado, aunque no imposible.
-
Zonas para vivir
Una vez que hayas decidido el tipo de vivienda, debes pensar en qué zonas quieres vivir. A diferencia de las pequeñas ciudades o pueblos, las viviendas situadas en ciudades como Madrid, Barcelona o Valencia varían su precio dependiendo de la zona seleccionada. Así, algunos barrios son el doble o el triple de demandados que otros, lo cual se traduce en el precio de los alquileres.
Nuestro consejo es que elabores una lista de barrios en los que no te importaría habitar. Posteriormente, busca viviendas por esos barrios para comprobar el precio medio que suelen ofrecer los inquilinos. Esta búsqueda impedirá que pagues de más por una vivienda que, aunque te pueda parecer jugosa a primera vista, sea muy cara para la zona en la que está.
-
Precio máximo
Teniendo en cuenta los barrios y las características de la vivienda, fíjate un precio máximo o tope de alquiler que estás dispuesto a pagar. El techo de alquiler debe ser realista y para ello debes considerar los ingresos mensuales con los que cuentas.
Además, no olvides sumar ciertos gastos a los pisos o viviendas que se encuentran alejados de tu zona de trabajo. Por ejemplo, en las zonas periféricas, los alquileres son más baratos que en el centro. No obstante, a ese alquiler debemos sumar los costes del traslado, es decir, el precio del transporte público y el tiempo que invertirás cada día en llegar a tu oficina o lugar de trabajo.
En definitiva, no te quedes solo con el precio de la vivienda en sí, sino con el pack completo del alquiler.
-
Comienza a buscar
A partir de este momento, comienza la parte práctica de la búsqueda. Los pisos de alquiler en las grandes ciudades suelen solicitarse rápidamente. Por ello, nosotros te recomendamos que elabores una lista de «favoritos» en el buscador que utilices. Esta lista debe ser práctica, es decir, no incluyas vivienda que sabes que no vas a alquilar. Una vez elaborada esa lista inicial, ponte en contacto con los propietarios para ir a visitar el piso lo antes posible.
-
Mantente conectado
Las plataformas especializadas en alquiler de pisos, como Rentola, actualizan su web de manera constante. Pese a que estés en contacto con otros inquilinos, actualiza la web siempre que puedas y contacta con los propietarios. Es posible que encuentres un piso a un precio mucho más bajo de lo que se suele pagar. Eso sí, tendrás que ser rápido.
-
Marca la diferencia
Cuando visites la vivienda o conozcas al propietario, intenta ser educado, respetuoso y cercano. Aunque se nos suela olvidar, los propietarios alquilan su vivienda a un desconocido. Por ende, suelen mostrar predilección por las personas que les transmiten tranquilidad, simpatía y madurez. Muéstrate interesado y haz todas las preguntas necesarias sin perder la educación.
-
No dejes nada en el tintero
En el mundo del alquiler de viviendas te encontrarás con propietarios de todo tipo: responsables, olvidadizos, cuidadosos, negligentes… Dado que tú eres la persona que vas a vivir en su propiedad, acude a la cita con la información preparada.
Algunas preguntas que no puedes olvidar son: si el alquiler incluye o no los gastos, cuánto importe mensual suelen acarrear los mismos, con cuánto tiempo cuentas para poder abandonar el piso en caso de necesitarlo, etc.
En definitiva, no olvides que, al igual que el propietario, tú también cuentas con derechos que debes conocer. Por ende, no tengas miedo a la hora de plantear tus dudas.