La cama articulada, también conocida como eléctrica, es algo que cada vez está más común entre las opciones para tener un descanso cómodo y efectivo. El somier puede articularse en muchos planos e incluye un motor eléctrico para proporcionar el movimiento, que es diferente al de una cama tradicional.
El tipo de somier que seleccionemos determinará si la cama tiene un tipo de articulación u otro. Aunque el mecanismo de articulación manual es una opción, las camas con sistemas de motor son cada vez más populares.
Principales características de las camas articuladas
En las camas articuladas se pueden adoptar diversas posturas, especialmente para las piernas, la cervical y el área lumbar. Estas camas se diferencian de las normales en que el somier dispone de mecanismos que permiten regular estos ajustes para proporcionar al usuario más comodidad.
Se fabrican camas articuladas de tamaño simple o doble y tienen controles mecánicos o eléctricos. En el caso de las camas de accionamiento mecánico, las personas con problemas de movilidad necesitan la ayuda de otra persona para utilizar las palancas de ajuste.
Algunas camas permiten al usuario ajustar cada porción de forma independiente, y las camas de accionamiento eléctrico se controlan mediante botones y suelen contar con dispositivos de control remoto para cambiar la cama según sus preferencias. En ocasiones también incluyen una función de masaje basada en el colchón.
A pesar de ser populares por encontrarse en los hospitales, las camas articuladas están siendo aceptadas para su uso en casa, sobre todo por quienes necesitan comodidad porque deben estar en la cama durante un largo periodo de tiempo fuera del hospital.
Sin embargo, también es una buena elección para quienes disfrutan de la comodidad de la cama mientras leen o ven la televisión. Algunas camas dobles permiten el funcionamiento individual de cada lado de la cama, en estos casos deberían colocarse dos colchones.
Tipos de camas articuladas
A diferencia de lo que la mayoría puede pensar, existen diferentes tipos de camas articuladas entre las que puedes elegir. Algunas de las más comunes son:
De acuerdo al número de planos
El número de planos permite diferenciar entre 4 tipos de camas articuladas diferentes. Cuando hablamos de “planos” nos referimos a la cantidad de secciones en que se puede accionar el somier para alcanzar la postura deseada. Se dividen así:
- Dos planos: pueden elevarse en la parte superior del cuerpo, es decir, la cabeza y el tronco. Es la recomendada para las personas con problemas digestivos.
- Tres planos: además del tronco, permite elevar las piernas para mantener la zona de la pelvis en posición fija. Para aquellos con problemas en el aparato circulatorio es la opción adecuada.
- Cuatro planos: elevan tanto el tronco como las piernas de forma vertical y la parte inferior del cuerpo es alzada de manera horizontal. Es la cama recomendada para aquellos con patologías graves.
- Cinco planos: consiste en el grado máximo de articulación, suele emplearse por aquellos con condiciones en el cuello y la cervical.
Según el tamaño
Se encuentran divididas en camas individuales que como lo indica su nombre es para una sola persona o camas de matrimonio. Estas últimas son indicadas para usarlas por dos personas y sus medidas son de entre 1,20 y 140m de ancho por 1,80 y 2m de largo.
De acuerdo al mecanismo accionador
Los mecanismos se dividen en manual y eléctrica. La manual posee palancas y manivelas para ajustar en la posición deseada. Por su parte, las eléctricas trabajan a través de un motor que se controla por un panel de botones o un control remoto.