El césped artificial es una alfombra que está diseñada para parecerse al natural. Aunque el objetivo es imitar la hierba natural, este césped está totalmente fabricado con materiales sintéticos. La gran ventaja de esta cubierta para patios y jardines es que no requiere agua para regar y se mantiene siempre hermosa sin mayores cuidados. Al usarlo cerca de la piscina, además, de espacios estéticos ofrece seguridad por ser antideslizante y muy higiénico.
Razones para instalar césped artificial alrededor de la piscina
Cuando se tratar de tener piscinas con césped artificial las ventajas que proporciona son variadas y van desde el bajo coste por mantenimiento hasta la comodidad, higiene y seguridad:
El césped artificial requiere poco mantenimiento
Tener un jardín con piscina es un motivo de celebración, no de preocupación. La labor de cortar el césped puede resultar aburrida y laboriosa debido al calor del verano. Este tipo de faena también quita tiempo para atender a las visitas o disfrutar del baño en la piscina.
El césped artificial para piscinas requiere muy pocos cuidados y permitirá ahorrar dinero. Su mantenimiento es tan sencillo como cepillarlo y lavarlo de vez en cuando, lo cual hará posible disfrutar de él siempre que se desee.
Menos plagas
El césped artificial es una forma estupenda de evitar los insectos en el jardín. Esto es muy importante sobre todo alrededor de la piscina, ya que no es para nada agradable pasar un día de verano disfrutando de la piscina y ser atacado por hormigas, mosquitos, cucarachas y otros insectos molestos. La inexistencia de insectos y todo tipo de plagas es esencial no solo por comodidad, sino también por seguridad.
Los insectos son más frecuentes cuando hace calor y son especialmente comunes en las piscinas con césped natural. Las picaduras pueden ser bastante peligrosas para algunas personas, sobre todo para los niños, ancianos y bebés.
Es una buena idea instalar cesped artificial piscina y en los demás espacios exteriores para evitar las plagas y proporcionar más comodidad a la hora de bañarse en la piscina.
No requiere químicos
Un gran beneficio del césped artificial es que no se necesita de pesticidas, herbicidas o fertilizantes químicos, lo cual brinda un enorme nivel de seguridad.
Estos químicos pueden tener efectos severos secundarios adversos si entran en contacto con los ojos o la piel. Obviamente, si se dispone de una piscina es probable que se use el tiempo fuera del agua para descansar en el césped. Pero, hacer esto no supone riesgos para la salud porque no posee agentes químicos venenosos.
El césped artificial es más duradero
El césped artificial es considerablemente más fuerte, resistente y duradero desde cualquier punto de vista.. Las variaciones meteorológicas afectan poco al césped artificial, pero el césped natural es más vulnerable a los daños cuando hace frío o calor, se congela o se seca. Por eso es una estupenda idea tener una piscina con cesped artificial.
El cloro del agua de la piscina no estropea al césped sintético, aunque puede secar a la hierba natural.
Un césped artificial o sintético de alta calidad no trae consigo el riesgo de resbalones o caídas. Sobre todo cuando hay niños jugando o ancianos con movilidad reducida en el área aledaña a la piscina. Tampoco atrae a gusanos ni bichos de ningún tipo.
Como no hay irregularidades en la tierra en las que se estanque el agua, la limpieza del césped artificial con agua y cepillado no afecta la pureza del agua de la piscina.
Como el césped artificial de alta calidad es resistente al cloro y a otros productos químicos, conserva su color verde original y su suavidad.
Crea espacios de alto valor estético
No hay un contraste más hermoso a la luz del sol del verano que al azul de la piscina y el verde intenso del césped. Sea cual sea el estilo de la misma, si está rodeada de este manto que asemeja una capa vegetal, los espacios son muy estéticos y atractivos.