Las casas de madera han experimentado un gran desarrollo en los últimos años. Cálidas, estéticas y llenas de ventajas, muchas familias eligen esta opción para vivir. Aunque las casas con estructura de madera representan casi el 80% de las obras de construcción cada año, las verdaderas casas de madera están surgiendo por todas partes, casi siempre como parte de un proyecto global que pretende integrar la casa en su entorno. Descubre las ventajas e inconvenientes de una casa de madera, y entenderás por qué cada vez más gente se decanta por este tipo de construcciones.
Material ecológico
La madera es un material ecológico, porque es totalmente renovable. Contribuye a la lucha contra el efecto invernadero reduciendo los gases y almacenando el carbono que contiene durante toda su vida, por lo que evita que se libere a la atmósfera. También es un material mucho menos contaminante que el hormigón o el acero.
Sin embargo, para ser totalmente ecológica, la casa de madera debe diseñarse como un total. Una casa de madera, que afecta a más del 80% de los proyectos de este tipo, utiliza únicamente una estructura de madera reconstituida recubierta de hormigón y otros materiales no ecológicos que no tienen las mismas cualidades. Esto no es comparable a una casa fabricada únicamente con madera, lo que sería mucho más respetuoso con el medio ambiente.
Estética inmejorable
Una casa de madera es mucho más bonita y cálida que una construcción tradicional. Agradable para vivir, generalmente está diseñada para integrarse en su entorno. Por eso, es una buena forma de alejarse del día a día en la ciudad.
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Aislamiento natural
La madera es un excelente aislante acústico y térmico, hasta el punto de que aísla 12 veces mejor que el hormigón y 400 veces mejor que el acero. Gracias a su baja conductividad térmica, no provoca condensación y, por lo tanto, limita la humedad interior y la aparición de moho. Estas propiedades permiten construir casas altamente aisladas y energéticamente eficientes de manera natural.
Madera resistente
Este material natural es duradero, sólido y muy resistente a las inclemencias del frío y del calor. Es apreciado por su baja conductividad térmica, lo que lo convierte en un material excelente para construir una casa. Además, es mucho más resistente al fuego que otros materiales de construcción tradicional.
Ligera y modulable
La madera es ligera (7 veces más ligera que el hormigón) y permite una gran libertad en cuando a posibilidades arquitectónicas. Además, la construcción de las casas de madera es mucho más rápida que una vivienda tradicional.
Aunque algunos constructores ofrecen cimientos de madera, la mayoría recomienda una simple capa de hormigón. En el tiempo que tarde en verterse y secarse, el constructor se encarga de construir las paredes de madera y las entrega en la obra para su montaje en pocos días.
Como ves, todas estas ventajas (y muchas otras) son las que han impulsado el éxito de las casas de madera en los últimos años en todo el mundo.
