El ser humano ha sido especialmente irresponsable en lo que respecta al cuidado del planeta, provocando una ingente variedad de daños medioambientales como fruto de su ambición por optimizar la comodidad colectiva. No obstante, ahora que todas las alarmas ecológicas están disparadas, es el momento de que las dinámicas de consumo del conjunto de la población cambien radicalmente. Algo que también se ha visto influenciado por el desarrollo tecnológico e ingeniero en lo que respecta a las energías renovables. Por ende, es importante hablar de las mejores fuentes energéticas actuales y de aquellas empresas que están contribuyendo a su desarrollo.
Cómo se obtiene el biogás
Uno de los aspectos que más ha contribuido al daño del planeta es el derroche de los recursos naturales de los que disponemos. Sin embargo, compañías como la empresa biogas SUEZ, más concretamente su equipo de Air & Climate, llevan más de 25 años en marcha para cambiar las cosas. Un colectivo de más de 140 profesionales que colabora con las administraciones públicas para mejorar la calidad del aire y plantar cara al cambio climático.
¿Cómo lo hace? Mediante la implementación de sistemas de biogás. Este sistema energético se basa en la descomposición de la materia orgánica, la cual presenta hasta un 60% de biometano. Al purificarse y extraerse este componente, el resultado es la obtención de una energía con la mismas características que el gas natural; pero sin el impacto que este presenta.
Los residuos sólidos urbanos, los lodos de depuradoras o el estiércol son algunos de los elementos clave en la producción del biogás. Actualmente, España cuenta con 210 plantas activas de biogás y el compromiso de SUEZ es aumentar esta cantidad para lograr sustituir el consumo de gas natural fósil por el de un sistema mucho más sostenible.
Ventajas del biogás
Para entender por qué es tan importante pasarse al biogas en España, lo mejor es analizar algunas de las ventajas que nos presenta este tipo de energía. Desde SUEZ se adaptan a las distintas composiciones de las materias primas, garantizando que la inyección a la red de dicha fuente energética es perfecta y eficaz.
En este orden de ideas, cabe destacar que se trata de una energía renovable e inagotable. Siempre y cuando haya materia orgánica (algo que no va a cambiar jamás), habrá biogás. Bien sea a través de los desechos animales y vegetales, tan comunes en las granjas y la agricultura. Por lo que estamos ante un sistema cíclico, algo especialmente beneficioso para el ecosistema.
La emisión de sustancias tóxicas y contaminantes comparada con los combustibles fósiles o la energía nuclear es realmente baja. Un recurso clave para la producción de electricidad, calor e incluso combustible para los vehículos que ya está aportando su grano de arena para el imperante cambio social que hemos de hacer en favor de la ecología.
Avances tecnológicos para el enriquecimiento del biogás
Ahora bien, nada de esto sería posible sin la continua inversión que realizan las empresas de producción de biogas para mantenerse sujetas a la máxima innovación tecnológica. Este es el caso de SUEZ, donde integran estos nuevos sistemas para dar respuesta a cada problemática y así adaptarse a las necesidades concretas de cada cliente.
En este punto hay que poner en valor el papel del proceso de enriquecimiento del biogás, el cual busca obtener el máximo volumen de biometano o, lo que es lo mismo, la máxima cantidad de energía. Un trabajo que se realiza por medio de diferentes sistemas, como la tecnología de membranas, la de aminas, el sistema PSA o la criogenización.
Sea como sea, desde SUEZ se han especializado en todas estás técnicas de enriquecimiento y las ponen en marcha según los requisitos concretos de cada proyecto. Unos proyectos que resuelven con la máxima diligencia, tal y como lo demuestran los vertederos, ecoparques y espacios de tratamientos de aguas residuales que ya han hecho realidad y operan al máximo rendimiento.
